La Historia de esos días

La Historia de esos días

La historia de esos días

7 de junio de 2011

Mueren 9 de 10 embarazadas por negligencia

Puebla, el décimo lugar a nivel nacional por muerte materna


En los primeros meses de 2011, se registran 19 muertes por causas directas al embarazo; el mayor número de féminas que mueren son las que están afiliadas al Seguro Popular.

2011-06-07•Reportaje Milenio Puebla
Por Guadalupe Gálvez
Foto: Andrés Lobato
Nueve de cada 10 mujeres embarazadas en Puebla mueren por negligencia de los médicos, enfermeras, trabajadoras sociales o los policías que las reciben al llegar a las unidades médicas u hospitales públicos. Ya no es por pobreza o marginación, o porque sean analfabetas.
Mueren porque se cree que el dar a luz es cualquier cosa, porque se tardan dos horas en hacerles una transfusión o las dejan en trabajo de parto hasta 4 horas en una sala de espera.
María del Socorro Cabrera Salgado es responsable estatal del Programa de Prevención de la Mortalidad Materna, área donde se ha desempañado durante los últimos 12 años.
Explica que las causas de muerte de embarazadas en Puebla son una situación grave, porque es culpa del mal sistema de atención a las féminas, malos hábitos o costumbres de los médicos y la falta de sanciones a quienes reinciden al ocasionar por falta de sensibilidad la muerte de una mujer en gestación.
“Siempre se pensó que la mujeres que mueren por un embarazo son personas que no cuidan su salud, que están en zonas rurales muy marginadas, analfabetas, multigestas, sin control prenatal. La realidad es que desde hace 3 o 4 años, en el estado ocurre lo que la Dirección de Equidad de Género conoce como cambios de paradigmas en la mortalidad materna. Este cambio significa que las señoras que mueren son alfabetas, de zonas urbanas o semiurbanas, que no son atendidas por parteras.”
Con estadísticas en la mano, Lidia Valdovinos Salas, coordinadora del Programa “Arranque Parejo en la Vida” agrega: "en el resto del país la primera causa de muerte en una mujer embarazada es la preclampsia, producida por presión arterial alta. En Puebla, durante el 2010 murieron sólo 8 por preclampsia, el resto por hemorragia producto de “mala calidad en la atención”.
Estas muertes ocurren en el hospital o en el hogar, porque fueron dadas de alta puesto que el médico no detectó la gravedad o el riesgo de la paciente.
Evitables 8 de 10 muertes
Cabrera Salgado insiste: “lo más grave y la que nos está pegando actualmente en Puebla es la demora en la atención médica. La señora llega a la Unidad de Salud y no hay calidad de atención, no hay oportunidad, y eso tiene que ver con la actitud del personal.
“El 92 por ciento de las defunciones ocurrieron por falta de calidad en la atención y entonces es muy grave porque al final esto es totalmente la responsabilidad de la institución (…) La mayoría ocurren en las unidades a cargo de la SSA, porque es la que atiende población abierta, y por lo tanto son más las mujeres que pierden la vida y que están afiliadas al Seguro Popular.”

La doctora cuenta que 8 de cada 10 muertes eran evitables. Añade, evitando dar nombres de hospitales, regiones o médicos, que la mayor cantidad de muertes maternas en Puebla son porque “a las mujeres no las reciben (en el hospital) o si las reciben las tienen en sala de espera 2 o 3 horas, cuando el manejo debe verse inmediato; o la recibe el trabajador social, la enfermera o el policía y la refieren a otro lugar y la señora anda peregrinando de unidad en unidad, y no se tardó ella sino que el sistema está mal. La señora llega y en lugar de darle una referencia o traslado adecuado... O sea, si llegas conmigo y no tengo médico mi deber es estabilizarte, canalizarte, darte una solución, conseguir un vehículo y no decir: ‘ay qué bueno que trae camioneta, vete ni te bajes’.”
Explica que estos casos ocurren por ejemplo en el Hospital General del Norte, “donde hay 50 paquetes de sangre en su stock y no le ponen uno solo a la señora porque en el proceso de cuando se solicitó la sangre se demoraron 2 horas en ir a ver quién se las iba a dar. Son cosas que no pueden ocurrir en un hospital”.
Las estadísticas
Según las estadísticas, Puebla es el décimo lugar en muertes maternas en el país, y entre enero de 2008 y mayo de 2010 ha registrado 216 casos, de los cuales 36 corresponden a madres de entre 12 a 20 años de edad.
En los primeros 5 meses de 2011, la SSA ya registró 19 casos de muertes maternas debido a causas directas con el embarazo. De estos fallecimiento, 11 de ellos fueron en hospitales de la SSA, 3 en el hogar, 2 en el Issstep y uno en el Issste.
Nueve de cada 10 muertes de mujeres embarazadas ocurridas en 2010, cuando se registraron 57 en total, fueron por negligencia; además, el 90 por ciento eran personas inscritas al Seguro Popular.
En 2010, 26 fallecimientos fueron en alguna instalación de la SSA; 14 en el hogar; 6 en instituciones privadas; 5 en el traslado al nosocomio; 3 en clínicas del IMSS-Oportunidades, uno en el IMSS ordinario y uno en el Hospital Universitario.
El IMSS-Oportunidades y el IMSS en el régimen ordinario registraron la disminución más importante en casos entre 2009, 2010 y lo que va de 2011.
El IMSS-Oportunidades, que atiende a población rural marginada, bajó a 50 por ciento el número de casos, mientras que el IMSS en su régimen ordinario los disminuyó más de 93 por ciento.
En el caso de la SSA estatal, los datos preliminares reflejan un estancamiento en el número de incidencia, pues mientras en 2008 hubo 26 casos, en 2009 hubo 21, pero en 2010 de nueva cuenta fueron 26. Si estas cifras se comparan con las de 2011, se concluye que la tendencia en ocurrencia de muertes es similar.
Alto a la protección sindical
María del Socorro Cabrera, responsable estatal de la Prevención de la Mortalidad Materna, se manifestó por ponerle un alto desde el gobierno estatal a la protección que el sindicato brinda a quienes ocasionan la muerte de madres gestantes por negligencia.
Para ello, propone sanciones ejemplares para médicos y enfermeras con malas prácticas, con la implicación penal de responsabilidades.

“Tenemos médicos que ya no nos extraña que se les mueran las pacientes porque es obvio que la calidad de atención es mala, pero el problema de fondo es que no hay una regulación.”
¿Cómo corregir está situación?, ¿cómo evitar que haya muertes durante embarazos por negligencia?
Hasta hace poco teníamos, y espero que éste no sea el caso porque las cosas están cambiando, un gobierno paternalista en salud. Se detectan nombres, se sabe de cosas que no deben ocurrir, omisiones, y desgraciadamente entre el sindicato y las autoridades decidimos no hacer nada y todos nos volvemos cómplices.
“En el comité en el que se analizan cada una de estas muertes, no se tiene un sentido de búsqueda de culpable, sino para saber qué pasó y qué puedo hacer para no repetirlo; es como darte cuenta dónde te tropezaste y quitas las piedra, pero lo que sucede realmente es que nos estamos volviendo cómplices, porque es una tras otra y otra tras otra.”
Por esta situación y para evitar prácticas del pasado, los casos de muerte materna se están pasando a la Cesamed, “que por desgracia sólo emite recomendaciones, y va a decir que al médico se le haga tal o cual cosa, pero desgraciadamente no hay sanciones”.
Puso de ejemplo que en este año se registraron los primeros dos casos de médicos sancionados, pese a no ser “repetidores” en ocasionar muertes maternas. “Fue una sanción administrativa, más de tipo económico, pero ellos siguen en su cargo.”

5 de junio de 2011

Porque no votó por él, alcalde auxiliar da salvaje golpiza a una mujer


Redacción Sicla purpura
Chiconcuautla, Pue.- “Si se muere tu mamá vamos a decir quien lo hizo, si no se muere pues no decimos. Al fin que todo se puede arreglar  con dinero”, le dijo el regidor de Gobernación del municipio de Chiconcuautla, Jaime Martínez a Irene Licona Rivera, luego de que su madre Margarita María Rivera fuera salvajemente golpeada por el presidente auxiliar de la Tlaxco, Bonifacio Jiménez, “porque no votó por él”.

Los violentos hechos se produjeron la madrugada del pasado lunes 23 de Mayo en la calle que va al kínder en esa comunidad de este municipio de la Sierra Norte de Puebla, considerado como de muy alta marginación, luego de que Margarita María saliera a buscar a su marido, Ernesto Licona Mora “porque estaba preocupada”.
La mujer, indígena hablante del náhuatl de 42 años, fue atacada por varios sujetos, pero sólo pudo reconocer a uno: “era el Boni, Bonifacio Jiménez. Él fue el que me dijo que como no vote por él, por eso te voy a madrear”.
Con unos diez puntos de sutura en la barba, un paliacate amarrado a la cabeza, los brazos y el torso llenos de moretones, Margarita María narra la agresión: “Yo iba caminando cuando me lo encontré y me empezó a reclamar, luego me dio patadas y manotazos en la cabeza, en el cuello. Luego con su mano me agarró del pescuezo y no sé con qué me cortó. Me tiró al suelo, ahí me dieron patadas por todos lados y ya no supe más”.
“Nunca he tenido problemas con él, tampoco mi marido. Sólo que como soy prima de Rosendo Rojas Pineda, el otro candidato a presidente, el Boni me decía que vote por Rosendo”, explica Margarita María con una voz apenas audible, en la que se deja ver su hastío, su cansancio por tener que enfrentar otra situación de violencia.
Como la mujer tardaba, llegaron sus familiares y la encontraron en la calle, tirada, sangrando. La llevaron a la clínica del IMSS de Tlaxco, a donde más tarde llegó Jaime Martínez, el regidor de Gobernación del ayuntamiento encabezado por el petista Noé Garrido Hernández, para sacarla de ahí y trasladarla al Hospital General de Huauchinango, donde estuvo internada tres días.
Antes de llegar al nosocomio, el concejal le aconsejó a Irene, la hija de Margarita María que “si los doctores preguntaban qué había pasado, había que decir que se había caído en el piso. Luego me dijo: ‘si tu mamá se muere, decimos quién fue el responsable, si no se muere no hay que decirlo. Al fin que todo se puede arreglar con dinero’”.
Pero los doctores no me creyeron, dice Irene; y asegura que pese a la gravedad de las lesiones que presentaba su madre y sus sospechas, los médicos tampoco hicieron del conocimiento del Ministerio Público el ingreso hospitalario de una mujer que presentaba heridas profundas y golpes en casi todo su cuerpo.
“Gracia a dios mi mamá no se murió, pero ahorita dice que le duelen todos sus huesos, dice que no puede respirar, la patearon en el pecho, todavía tiene moretones. Yo sólo quiero que se haga justicia, porque ahora que regrese al pueblo no sea que otro día le vuelva a pegar. A mi me dijeron que no hablara de esto, porque me podía ir mal. Pero la verdad no entiendo por qué a Bonifacio le dio tanto coraje con mi mamá, ella ni siquiera pudo votar, ni por él, ni por nadie: no tiene credencial de elector, no tiene papeles”, agrega Irene Licona Rivera.
Y en efecto, el viernes pasado cuando Margarita María pudo viajar a Huauchinango para presentar ante el Ministerio Público una denuncia en contra el presidente auxiliar de Tlaxco, Bonifacio Jiménez, su agresor, no pudo hacerlo, porque no cuenta con ninguna identificación.
Al fiscal no le bastaron las visibles muestras de la golpiza que le propinaron a la mujer para iniciar una investigación de los hechos, y ahora tendrá que volver a la oficina con una constancia que le tiene que expedir el presidente municipal de Chiconcuautla, Noé Garrido, quien respaldó la candidatura de Bonifacio, para ver si ahora sí, le hacen favor de darle acceso a la procuración de justicia.

En Puebla, gobierno y prensa sin Acción por la Salud de las Mujeres


 Por Alma Leticia León

El 28 de mayo, Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres,instaurado en 1987 y que fue propuesto por las participantes del V Encuentro Internacional Mujer y Salud, celebrado ese año en San José, Costa Rica, en Puebla pasó sin pena ni gloria, más bien con pena, pues no fue recordado por ninguna autoridad del gobierno estatal de Puebla  y las conmemoraciones de organizaciones civiles, no fueron documentadas por la prensa.
En la víspera del 28 de mayo, la periodista y feminista Kara Castillo publicó:

Puebla, cuarto lugar nacional de muertes maternas: Ddeser
Puebla ocupa el 4 lugar nacional de muertes maternas, el sexto con mujeres enfermas a causa del cáncer cérvico uterino con 5 mil fallecimientos por año y es el estado donde el número de mujeres infectadas con VIH-sida rebasa la proporción nacional.
 Revelaron las directoras de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México, (Ddeser), en la víspera del Día internacional de acción por la salud de la mujer, que se conmemora hoy 28 de mayo. “La salud de las mujeres en este estado está en el limbo”, acusaron.
La escandalosa situación de salud de las mujeres en el estado será denunciada en una campaña que inicia hoy en el estado por la organización no gubernamental Ddeser. Será con pequeños afiches y tarjetas adheribles (stikers) con la figura de una indignada Mafalda, que las cifras de la condición de las mujeres en Puebla serán reveladas. “Nosotras estábamos molestas, pero ahora estamos indignadas porque en Puebla el 9.5% de las mujeres ha sido víctima de violencia sexual. Porque en Puebla se registran 63 muertes maternas cada año y la mayoría de estos fallecimientos pudo evitarse de haber tenido un médico cerca. En promedio en el estado diariamente ocurren 5 interrupciones del embarazo por múltiples causas. Porque Puebla es el quinto estado con mayores fallecimientos por interrupciones de embarazos inducidos y clandestinos. Porque en Puebla existen 30 mujeres procesadas como delincuentes por interrumpir su embarazo.,,”

En el monitoreo diario que realiza el Sicla, esta nota fue la única que destacó las conmemoraciones del 28 de mayo, Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres.
El acto que montó Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México, (Ddeser), que llamó Ser madre no es juego de niñas, a pesar de que contó con una gran asistencia, no fue reporteado por ningún medio. Así como tampoco las acciones realizadas por algunos grupos feministas, como volanteo y mítines relámpagos efectuados en el zócalo capitalino.
Quedó en claro que el  28 de mayo, Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres, no tiene ningún significado en la agenda del gobierno panista de Rafael Moreno Valle Rosas, y por lo tanto, tampoco existe en la prensa poblana la que sólo  se dedica a repicar los actos gubernamentales.
La nota de Kara Castillo, publicada por  Puntual  informa sobre  la escandalosa situación de salud de las mujeres en el estado que será denunciada en una campaña que inicia hoy en el estado por la organización no gubernamental Ddeser. Será con pequeños afiches y tarjetas adheribles (stikers) con la figura de una indignada Mafalda, que las cifras de la condición de las mujeres en Puebla serán reveladas. “Nosotras estábamos molestas, pero ahora estamos indignadas porque en Puebla el 9.5% de las mujeres ha sido víctima de violencia sexual. Porque en Puebla se registran 63 muertes maternas cada año y la mayoría de estos fallecimientos pudo evitarse de haber tenido un médico cerca. En promedio en el estado diariamente ocurren 5 interrupciones del embarazo por múltiples causas. Porque Puebla es el quinto estado con mayores fallecimientos por interrupciones de embarazos inducidos y clandestinos. Porque en Puebla existen 30 mujeres procesadas como delincuentes por interrumpir su embarazo.”
Para Natali Hernández, representante de la Ddeser en Puebla, la grave crisis de salud que viven las mujeres en el estado no está siendo atendida por autoridades. “Existe una omisión en los servicios de salud del estado, sólo hay que ver las cifras”, denunció
Reveló que no existen políticas públicas a la altura de la problemática que vive el estado y que esta deficiencia no ha alcanzado la propuesta de ningún candidato que contiende en esta carrera electoral.

…, las activistas con documentos de la Secretaría de Salud develaron que en el primer trimestre en Puebla hubo 10 muertes maternas en los municipios de Ahuazotepec, Jalpan, Puebla, Quimixtán, Tepotzintla, Xiutetelco y Zacapoaxtla. Estas defunciones fueron de jóvenes de 10 a 39 años.
Para la organización, es evidente que la mortalidad materna constituye un grave problema de salud pública, que revela algunas de las más profundas inequidades y es el reflejo del estado de salud de las mujeres en edad reproductiva, así como de acceso a los servicios de salud y calidad de la atención que reciben, incluido el acceso a la anticoncepción, que conlleva defunciones y daños a la salud totalmente evitables mediante un adecuado control y atención.
Explicaron que algunos de los principales obstáculos para el reconocimiento los derechos de las mujeres y que tienen consecuencias nocivas, en especial para sus derechos sexuales y reproductivos, son la histórica oposición de la jerarquía de la Iglesia católica, el impacto de la pobreza y los efectos de la violencia contra las mujeres en su salud integral.
Acusaron que la pobreza también podría ser un detonante, según el Informe 2009 de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), que provee importantes antecedentes sobre los efectos de la crisis económica mundial y sus costos humanos en las mujeres.
En cuanto a la salud sexual y reproductiva, cada año 536 mil mujeres fallecen como resultado de complicaciones del embarazo, el parto o el puerperio. Un 99 por ciento de estas muertes ocurre en países en desarrollo, donde hay más probabilidades de que las mujeres vivan en condiciones de pobreza.
La mortalidad materna en este contexto se considera uno los indicadores de salud que ponen en evidencia una de las mayores brechas entre ricos y pobres, tanto entre países como dentro de ellos.
Resulta revelador que las regiones desarrolladas se registran nueve muertes maternas por cada 100 mil nacidos vivos, en comparación con 450 en las regiones en desarrollo. En América Latina y el Caribe, países como Haití, Nicaragua, Guatemala, Paraguay y Bolivia, entre otros, presentan también un alto número de muertes maternas.
Complicaciones obstétricas tales como las hemorragias posparto, las infecciones, la eclampsia, el parto prolongado o la obstrucción del parto, y el aborto en condiciones de riesgo son causa de la mayoría de las muertes maternas.
Sin embargo, la mayoría de estos casos podría evitarse con servicios de salud reproductiva de buena calidad, con atención prenatal y postnatal, atención del parto por personal de salud calificado y acceso a servicios obstétricos de emergencia, todo lo cual sin duda es crítico en contextos con menores recursos.

Puebla, cuarto lugar nacional de muertes maternas: Ddeser

Autor: 
Por  Kara Castillo

Puebla ocupa el 4 lugar nacional de muertes maternas, el sexto con mujeres enfermas a causa del cáncer cérvico uterino con 5 mil fallecimientos por año y es el estado donde el número de mujeres infectadas con VIH-sida rebasa la proporción naciona
Revelaron las directoras de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México, (Ddeser), en la víspera del Día internacional de acción por la salud de la mujer, que se conmemoró el pasado 28 de mayo. “La salud de las mujeres en este estado está en el limbo”, acusaron.
La escandalosa situación de salud de las mujeres en el estado es denunciada en una campaña que inició ese día  en el estado por la organización no gubernamental Ddeser. Será con pequeños afiches y tarjetas adheribles (stikers) con la figura de una indignada Mafalda, que las cifras de la condición de las mujeres en Puebla serán reveladas. “Nosotras estábamos molestas, pero ahora estamos indignadas porque en Puebla el 9.5% de las mujeres ha sido víctima de violencia sexual. Porque en Puebla se registran 63 muertes maternas cada año y la mayoría de estos fallecimientos pudo evitarse de haber tenido un médico cerca. En promedio en el estado diariamente ocurren 5 interrupciones del embarazo por múltiples causas. Porque Puebla es el quinto estado con mayores fallecimientos por interrupciones de embarazos inducidos y clandestinos. Porque en Puebla existen 30 mujeres procesadas como delincuentes por interrumpir su embarazo.”
Para Natali Hernández, representante de la Ddeser en Puebla, la grave crisis de salud que viven las mujeres en el estado no está siendo atendida por autoridades. “Existe una omisión en los servicios de salud del estado, sólo hay que ver las cifras”, denunció
Reveló que no existen políticas públicas a la altura de la problemática que vive el estado y que esta deficiencia no ha alcanzado la propuesta de ningún candidato que contiende en esta carrera electoral.
En rueda de prensa, celebrada la mañana de ayer, las activistas con documentos de la Secretaría de Salud develaron que en el primer trimestre en Puebla hubo 10 muertes maternas en los municipios de Ahuazotepec, Jalpan, Puebla, Quimixtán, Tepotzintla, Xiutetelco y Zacapoaxtla. Estas defunciones fueron de jóvenes de 10 a 39 años.
Para la organización, es evidente que la mortalidad materna constituye un grave problema de salud pública, que revela algunas de las más profundas inequidades y es el reflejo del estado de salud de las mujeres en edad reproductiva, así como de acceso a los servicios de salud y calidad de la atención que reciben, incluido el acceso a la anticoncepción, que conlleva defunciones y daños a la salud totalmente evitables mediante un adecuado control y atención.
Explicaron que algunos de los principales obstáculos para el reconocimiento los derechos de las mujeres y que tienen consecuencias nocivas, en especial para sus derechos sexuales y reproductivos, son la histórica oposición de la jerarquía de la Iglesia católica, el impacto de la pobreza y los efectos de la violencia contra las mujeres en su salud integral.
Acusaron que la pobreza también podría ser un detonante, según el Informe 2009 de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), que provee importantes antecedentes sobre los efectos de la crisis económica mundial y sus costos humanos en las mujeres.
En cuanto a la salud sexual y reproductiva, cada año 536 mil mujeres fallecen como resultado de complicaciones del embarazo, el parto o el puerperio. Un 99 por ciento de estas muertes ocurre en países en desarrollo, donde hay más probabilidades de que las mujeres vivan en condiciones de pobreza.
La mortalidad materna en este contexto se considera uno los indicadores de salud que ponen en evidencia una de las mayores brechas entre ricos y pobres, tanto entre países como dentro de ellos.
Resulta revelador que las regiones desarrolladas se registran nueve muertes maternas por cada 100 mil nacidos vivos, en comparación con 450 en las regiones en desarrollo. En América Latina y el Caribe, países como Haití, Nicaragua, Guatemala, Paraguay y Bolivia, entre otros, presentan también un alto número de muertes maternas.
Complicaciones obstétricas tales como las hemorragias posparto, las infecciones, la eclampsia, el parto prolongado o la obstrucción del parto, y el aborto en condiciones de riesgo son causa de la mayoría de las muertes maternas.
Sin embargo, la mayoría de estos casos podría evitarse con servicios de salud reproductiva de buena calidad, con atención prenatal y postnatal, atención del parto por personal de salud calificado y acceso a
servicios obstétricos de emergencia, todo lo cual sin duda es crítico en contextos con menores recursos.

VIOLENCIA EXTREMA HACIA LAS POBLANAS



Por Vicky López Olvera

El Observatorio de Violencia Social y Género de la Universidad Iberoamericana Puebla, reveló que el porcentaje sobre violencia en Puebla supera al promedio nacional, y que nuestro estado ocupa el primer lugar en el rubro de violencia sexual que sufren las mujeres por sus exparejas en el ámbito privado, una muestra clara de la descomposición social que vivimos en nuestro estado, es el macabro hallazgo del cadáver de una niña de 13 años que fue descubierto dentro de una bolsa de plástico, en el interior de un tambo de 200 litros, localizado en la azotea de un edificio de la Unidad Habitacional, Loma Bella, la mañana del pasado 26 de mayo, joven que fue asesinada por su novio, otro menor de edad.
Considero que algo muy grave, aunado a esta terrible situación es la impunidad, pues según los datos dados a conocer, ocho de cada diez casos de violencia no son denunciados. De acuerdo a esta información, el motivo principal por el que ellas justifican no denunciar, es debido a que consideran que el maltrato de que son objeto no tiene importancia, o expresan que el hombre tiene derecho a reprenderlas, este erróneo argumento muestra el escaso conocimiento de las mujeres sobre sus propios derechos humanos, y pone en evidencia un grave caso de carencia de autoestima por parte de este género.
 Sobre los tipos de violencia que más incidencia tienen son la violencia extrema en espacios comunitarios, la violencia en el ámbito escolar, la discriminación y el acoso laboral, graves problemas extendidos en Puebla y en todos los casos la entidad ocupa uno de los primeros diez lugares en el país y su porcentaje supera el promedio nacional.
En cuanto a la violencia sexual sufrida por las mujeres del estado de Puebla, el Observatorio de Violencia Sexual y Genero dio a conocer que se supera en 9.6 puntos porcentuales al promedio nacional, además informó que más de 50 por ciento de las víctimas declararon no haber podido llegar a un acuerdo económico después de la separación, a esta situación se suma otro tipo de violencia, que es la económica, la cual repercute directamente en los hijos. Estos sucesos ponen en evidencia la crisis de valores humanos que estamos viviendo actualmente, -tema que precisamente aborde la semana pasada-, y lo más gravé de esto, es el tipo de aprendizaje que están recibiendo los menores de edad, mismo que están repitiendo dentro de su familia y en la escuela.
 Ante estos hechos surge una pregunta ¿Qué clase de sociedad tendremos en unos cuantos años?, creo que no es necesario esperar mucho tiempo para ver ya, las graves consecuencias de una cultura violenta, de hecho ya estamos viendo los estragos de la misma con el bulling, los feminicidios y la trata de personas. Lo importante a considerar, es frenar este hecho, es implementar todo tipo de estrategias para revertir este daño en el tejido social, como por ejemplo redoblar esfuerzos en las escuelas haciendo campañas sobre la importancia practicar valores como el respeto y la tolerancia, aspectos fundamentales para una armónica convivencia social.
La respuesta a la pregunta sobre ¿Cómo podemos frenar la violencia?, tiene varias aristas, una de ellas es que es un grave problema que debe ser atendido por parte de las instituciones públicas, sinceramente yo observo graves carencias sobre la implementación de programas que prevengan la violencia de género, y no noto que en el presente, se realicen conferencias, pláticas o foros sobre prevenir la violencia hacia las mujeres, en los cuales como primer punto se deberían dar a conocer las terribles cifras que tenemos en Puebla y como segunda acción sería indispensable implementar acciones conjuntas interinstitucionales, pues de acuerdo al Observatorio, una debilidad observada es que existe desorganización de las dependencias estatales en el manejo de estadísticas, ya que las áreas de seguridad pública y judiciales manejan diferente información, además de que no hay voluntad para hacer convenios.